Esos cuerpos que se buscan, esos labios que se extrañan son mis sueños callejeros que se abrazan a la botella barata de la sinrazón, y llorando noche a noche acurruco mi pasión en el frío de mi desolada cama.
Desnudo mi alma en cada sueño y vacío mi cuerpo como puedo si no te tengo, y cada amanecer que no te lloro es un beso al suelo que me vio crecer. Cuando llegará el momento de unir cuerpos, de gastar colchones y dar motivos a las flores para que nos odien al vernos amar.
Escribo mal lo que siento, pero me desnudo rápido y no miento si te digo que desde mi pecho ofrezco lo que tengo, lo que ves, lo que no da de comer a los ojos y alimenta los sentidos, esos que dejas ardiendo con tus rastro, los mismos que inundan las charcas que visito cuando quiero naufragar, por no tocarte, por no dejar de pensarte, por querer por ti ponerme a ladrar.
Ven visitame, levanta la noche que se acuesta en mis ojos y salgamos corriendo a ninguna parte cogidos por los corazones, marquemos nuestra desdicha en los troncos de los arboles y a caricias quiero que desvistas los matojos de mi impaciencia donde cada sonido del aire me dibuja tu figura elegante un amanecer tras otro.
Echo cuentas y a precio de tus besos vendo mis lagrimas, y en mis huesos dejo descansar tus miedos para que no vuelvan a molestar a los ojos que serenan a mis temblorosas manos.
"Y ser la neblina del bosque que mira y no deja mirar
penacho de invierno sediento de mi lagrimal"
Letra "Marea"
"PETENERA"